Quizá
desde que el mundo es mundo, la culpa ha
nacido huérfana. Así como a las derrotas, la orfandad ha resguardado en su regazo las mas infames y
variadas hechuras del ser humanos: Hasta los pedos parecieran carecer de
paternidad ; salvo aquellos que por azares de la vida son reconocidos por sus
autores. También por el azar se suele encomendar a los “pendejos” la autoría de toda suerte de
delitos. ¡..Vaya suerte la de nuestros inocentes..! . Tin Marín de dos pingüe …
Yo
traté de averiguar el origen de ese juego de palabras con las que de niños, y
aún de adultos , solemos sortear las desventuras humanas. Nada mas original que
echarle la culpa a los demás. Ese inocente juego suele servir para juzgar
y condenar al prójimo. Si no pregúntele al “chavizmo”
cómo ha sobrevivido inmerso en la corrupción. Es su modus operandi , atina a advertir algún estudioso de los
conceptos sociales. Atinar es dar en la diana…en el punto exacto hacia donde se
apunta un arma, un juicio, y en este aciago instante de nuestra historia, la
condena a muerte. Sí. Aunque la pena de muerte no aparece como un deber o un derecho
en el contexto constitucional, “el socialismo
del siglo XXI” , la revolución “bonita”, ha resultado muy certera en eso de disparar contra “sus
enemigos”.
El
ahora difunto , autor de este desmadre criollo, logró insertar entre sus
acólitos , la frase por siempre extranjera :”patria, socialismo o muerte”, con
la que la izquierda juzga y condena; por
no decir, fusila, a los que piensan
distinto. Originalmente la frase imponía ganar o morir en la lucha ; pero en
Venezuela supone la muerte de los demás. El difunto cumplió a cabalidad, con dos de las
premisas que abrazó :PATRIA: Se rodeó de
culpables , a quienes primero dejó corromperse para asegurar lealtades iracundas , y luego le
harían comparsa en “una patria” lista para ser dominada al gusto de sus mentores extranjeros: La traición
y la extorsión son una monedad de viejo cuño en “la institucionalidad”
venezolana. El otro “logro” fue esparcir la muerte que abunda en ejemplos sobre
el territorio venezolano. El fusil del hambre y la falta de medicamentos atina
en la diana diariamente en CASI todos los hogares de Venezuela : Así como atina
en la cabeza de los jóvenes estudiantes , y la ciudadanía que piensa. Y NO caigamos en la pendejada que los tiros
aciertan al son del Tín Marín : NI de vaina..! Ellos siempre apuntan sobre la testa de los ciudadanos que protestan contra
el gobierno. Vale la pena recordar el célebre jueguito de palabras, mientras el
tribunal de La Haya abunda en
expedientes de Lessa Humanidad contra los autores del genocidio. Tin Marín de dos piringüe, cucaramácara que “la izquierda” es…!
April 29th,2017
#SOSporVenezuela
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